|
"Reinaré en España"
04.07.09 - Escrito por: Ildefonso Moreno Juliá
Es la promesa del Corazón de Jesús en sus apariciones al padre Hoyos. "Reinaré en España", inscrita en el monumento del Cerro de los Ángeles en Getafe, como centro geográfico de la Peínsula. El domingo 21 de junio se celebró en referido monumento el noventa aniversario de la consagración de España al Corazón de Jesús, allá por 1919.
Como nos recuerda el Cardenal Rouco, eran unos años difíciles, la revolución soviética de 1917, la ruina material de Europa salida de la guerra y la huelga general en España, también en el mismo año, así como el terrorismo; pero también años de esperanza, como las apariciones de Fátima en 1917 y los pontificados de Benedicto XV, San Pío X y Pío XI, a quién debemos la festividad de Cristo Rey.
La fiesta del Sagrado Corazón de Jesús me trae recuerdos vividos en la niñez, mi madre (q.e.p.d.), era muy devota del Sagrado Corazón de Jesús; inculcando a su numerosa prole el amor y devoción a la sagrada imagen, de siempre y en lugar preferente que presidía la casa; incluso en el dintel de la puerta había una placa con su imagen que rezaba así: "Reinaré en las casas en que la imagen de mi corazón sea expuesta y venerada".
Tengo un vago recuerdo de cuando su sagrada imagen fue entronizada en la casa, ceremonia que llevó a cabo un santo sacerdote de Cabra, recordado por muchos egabrenses D. Antonio Povedano Roldán, fundador de las Escuelas del Ave María y bienhechor incansable, siempre al lado de los más necesitados y de una espiritualidad y una fe ejemplares.
Eran muchas las casas de Cabra que profesaban el amor al Sagrado Corazón y rezaban en torno a su imagen; como también ha dicho el Cardenal Rouco, el amor de Cristo llega hasta el fondo del hombre, le perdona sus pecados, le cura por dentro y le da nueva vida.
En Córdoba, gozmoa de un gran monumento al Corazón de Jesús, desde la sierra, en las ermitas, preside la ciudad y guarda a Córdoba y a los cordobeses.
Renovemos también nosotros esa gran conmemoración que se va a celebrar en el Cerro de los Ángeles y actualicemos nuestra devoción. Solo si confiamos en Él, encontraremos respuesta y soluciones a los males que acechan a la sociedad actual y como decía mi madre y tantos devotos, repitamos esa maravillosa jaculatoria: "Sagrado Corazón de Jesús, en Vos confío", es maravilloso.
|
|
|
|
|
|