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De Bodegas Cordobesas a Pallarés Hermanos (II)
23.11.15 - Escrito por: Antonio Ramón Jiménez Montes
 Continuamos ofreciendo a nuestros lectores algunos retazos de la historia de la antigua fábrica de Pallarés, en la que actualmente se encuentra Hecoliva y el Museo del Aceite, donde muy pronto tendrá lugar la IV Fiesta del Aceite Fresco. En nuestra anterior entrega les ofrecíamos algunos datos sobre la importancia del edificio modernista de las Bodegas Cordobesas, un patrimonio que pasó luego a formar parte de la fábrica de aceite de Pallarés Hermanos, S.A.
De Bodegas Cordobesas a Pallarés Hermanos (1913 -1940)
La firma Bodegas Cordobesas que se ubicó en los edificios modernistas construidos en Cabra junto al complejo de la fábrica aceitera de Pallarés, tuvo actividad entre 1913 y 1940. Formaba parte del grupo empresarial creado por Fernando Pallarés e hijos, S.A. establecido en 1904 con domicilio social en Tortosa. Una de sus instalaciones es la de Cabra, al frente de que está su hijo Luis Pallarés Delsors.
En 1916 la empresa cambia su domicilio social a Cabra y continúa como Fernando Pallarés e hijos, S.A. hasta 1933. Mientras tanto en el periodo comprendido entre 1913 y 1940, se comercializan vinos embotellados en Bodegas Cordobesas, y se van produciendo los avances en la fábrica de aceite. En 1928 se crea la empresa Pallarés Hermanos, S.A. constituida por Luis y José Pallarés Delsors, con un capital social de 500.000 pesetas. La central de la empresa está en Cabra y cuenta con sucursales en Nueva Carteya, Lucena, Torredonjimeno y Fuente de Piedra.
En enero de 1929, se produce una ampliación de capital en la firma Pallarés Hermanos, S.A. pasando de un capital de 500.000 a 7.000.000 de pesetas. Comienza un periodo expansivo que convertirá la firma en una de las más importantes empresas del sector de todo el mundo.
Luis Pallarés Delsors se integra en la vida local egabrense no solo por el vínculo matrimonial, sino que se implica en actividades políticas y culturales. Forma parte del Centro Republicano Egabrense, colaborando con las carrozas que esta asociación prepara para las fiestas de Septiembre - en 1935 consta la colaboración de 300 pesetas para esta carroza -. Es diputado por Córdoba con la Coalición Republicana. En esos años se está construyendo Villa Lourdes, Villa Carmen, La Venta, Palacio, incluso un panteón en el cementerio. El egocentrismo es uno de los rasgos de su personalidad y se ve reflejado en todas sus actividades.
Los libros de registro de salidas, reflejan inactividad entre el 19 de julio de 1936 y hasta mediados de septiembre del mismo año. El impacto del golpe militar del 18 de julio y la implicación republicana de Luis Pallarés podrían apuntarse como causas de esta paralización que se produjo en la fábrica o al menos, en lo que reflejan sus libros contables cuyas páginas entre esas fechas están en blanco.
La expansión del Acite de Cabra
En 1940 Bodegas Cordobesas, S.A. como empresa dedicada a la producción y venta de vinos finos, deja de tener actividad. Los edificios modernistas que las albergan, sufren la necesaria transformación para acomodarse a los usos que el molino y fábrica de aceite necesitaban. La industria del vino cede ante el empuje y vigor de la industria aceitera de Pallarés Hermanos, S.A.
El salto cualitativo del edificio en cuanto a producción tiene lugar en ese mismo año. Se contrata un molino moderno a Fundiciones Alba, cuya maquinaria llega a costar 800.000 pesetas, constituyendo el molino más grande de esa fundición, como acredita un catálogo de la época. Solo unos años más tarde, la fábrica de Pallarés Hermanos, S.A. en Cabra, es considerada como "la más importante del mundo", tal y como refleja un documental sobre el Aceite de Oliva que graba NODO en 1952. En el enlace adjunto, puede verse el documental completo "Olivos y Aceite", y entre los minutos 4.29 y 7.58, está grabado íntegramente en Cabra.
Las bodegas modernistas de Cabra, aquellas que se construyeron en 1913, precursoras del importante legado arquitectónico del modernismo catalán fuera del territorio, se salvan y el edificio se adapta para continuar prestando utilidad al emporio aceitero de los Pallarés en Cabra.
El auge de la producción de aceite va en paralelo al envasado, pues la empresa se encarga de la fabricación de latas en sus propias instalaciones (en el edificio de la Casa del Ancla). Pero lo que más destaca - y aquí podría radicar la importantísima expansión de los aceites de Cabra en todo el mundo - es una red comercial y de distribución que cuenta con representantes en todos los continentes y que exporta aceites bien a través de sus propios comerciales o estableciendo alianzas con profesionales y empresas de los territorios a los que llegan los bidones que salían de las fábricas de Cabra.
De la mano de Pallarés Hermanos S.A. el Aceite de Cabra cobra el valor que esta empresa le da llevando calidad a todas las partes del mundo bien a granel bien envasado. La fábrica más importante de aceite del mundo se expande y al mismo tiempo lleva nuestro oro líquido por todo el mundo. Para muestra un botón: una de las marcas registradas fue EMA, "el mejor aceite". Así, de las poco más de sesenta almazaras locales que había a finales del siglo XIX, el Aceite de Cabra se convierte en un producto muy apreciado con las más altas cotas de producción y expansión jamás imaginadas. Más de 162.000 kilos diarios con una producción total de 24 millones y medio en una campaña.
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